El Sr. Bush y el cambio climático

Al Sr. Bush no le interesa el cambio climático. Largo me lo fiáis. A los chinos tampoco. Después de mí el diluvio. A Luis XVI tampoco. ¿Vendrá luego la revolución? Porque los chinos no son revolucionarios, ¿lo fueron algún día?, la dictadura del partido ahogó la revolución. ¿Queda algún revolucionario en el mundo? ¿Acaso el camarada Fidel? Nunca lo sabremos, porque ya dicen los científicos que la observación distorsiona el objeto observado. Obviamente no los franceses, a pesar de la Marsellesa, ni los gringos, que se han olvidado de Washington y de Franklin. ¡Qué mundo! Dicen los científicos que el Sahara fue otrora una extensa sabana donde corrían los antílopes y cazaban los leones. Ya no hay antílopes, pero quedan leones que se devoran entre sí. Así acabaremos.