¿Somos una nación?

La derecha vuelve a la carga con uno de sus temas favoritos. A los que aún creen que somos una nación, se dirigen. España se rompe, gritan alarmados. Pero España se rompió hace mucho tiempo, siglos hace, y desde entonces nunca se ha recompuesto, siempre ha estado mal cosida, cada trozo por su lado, como un muñeco mal ensamblado, porque los que tuvieron la responsabilidad de su coordinación y ensamblaje no quisieron o no supieron.

El imperio americano, que pudo haber sido la gran empresa nacional, como lo fue para otros, fue para nosotros una empresa exclusivamente castellana, donde las otras partes de España no tuvieron cabida, porque la tan cacareada unidad de los RRCC fue una unidad mal hilvanada, sólo sustentada en la Iglesia y la Monarquía, todo lo demás quedaba fuera, por no haber ni moneda común hubo. La UE de hoy está mucho más unida que aquella España de estructura medieval. La Guerra de la Independencia ha sido quizá nuestra única empresa nacional. Veremos qué nos dicen cuando conmemoremos el segundo centenario dentro de un año. Pero la felonía de un rey contribuyó a romper aquella unión sagrada, que desde entonces no se ha rehecho.

Presumía el último dictador de haberla recompuesto, pero aquello no fue más que la dictadura de media España contra la otra media, un esperpento enmascarado con discursos grandilocuentes sobre una presunta unidad de destino irreal.